CONTADOR A CERO

Pues lo único que pido a nivel general es que termine de una puñetera vez la infausta guerra de Ucrania, y que las cosas, en la medida de lo posible, vuelvan a la senda de la normalidad y de la paz. A nivel internacional siempre hay cuestiones candentes, urgencias climáticas, energéticas, de suministros, de desarrollo de países, de necesidades de tanta y tanta gente. Pero el mejor modo de abordar todo eso es estableciendo unas condiciones de normalidad que pasan por que haya paz en todas partes.

A nivel nacional tenemos año electoral calentito, donde se verá quien es quien. El pueblo tiene la palabra este año, y será quien defina qué queremos para los próximos cuatro, como siempre. Suerte a todos y que gane el que mejor vaya a ser para todos. Y a ver si uno de estos días alguno de los partidos nombra a una mujer como líder con posibilidades de victoria, que tengo ganas de que nos gobierne una mujer para variar. Pero parece que, a pesar de la tan traída y llevada igualdad, a pesar de las normas que se publican para que funcionemos con equidad, son los hombres quienes siguen partiendo la pana. A estas alturas, la primera mujer con un puesto relevante será la hija del rey, Leonor. A saber si para entonces tendremos monarquía, aunque a la vista del discurso de Felipe el día de Nochebuena, parece que el hombre tiene una de las cabezas mejor amuebladas del país. Veremos qué pasa.

Mientras tanto, parte el año, disfruta de la noche, entra bien en 2023, achucha a quien tengas al lado, suerte en tu trabajo, salud a raudales, que te rías mucho, que compartas mucho, que sueñes mucho y que tus sueños, tus mejores sueños, se conviertan en realidad.

Y, en cualquier caso, que la ilusión siga invadiendo tu vida como la fragancia que deja la dama de noche cuando pasas por la avenida.

Feliz 2023.

Cuídate mucho…