LOS INDOMABLES

La voz melosa de Julio, la rasgada de Sabina. Niña Pastori se inunda del alma de las guitarras que rezan a de Lucía. Late un corazón partío por las palmas que llaman a Camarón. Pájaros que imitan a Krauss, el coraje de Donés, arte de Flores al aire, Jurado y Durcal eternas, suena Bisbal otra vez. En un lugar de la Mancha de Almodóvar otrosí, Amenábar que no acepta tener que vivir así. Morir de amor por Barden, Pataky, Cuesta y León. Cámara, Silvestre y Tosar, y Coronado y Baró. Fernán Gómez y Montiel, Closas y Blanca Suárez, Hugo Silva y la Verdú. Del Toro que desbordado dice: y tú, ¿qué harías tú? La triple A alternativa, Arguiñano, Arzak y Adriá. El corte de la cebolla y la tortilla sin cuajar. El pil pil en los altares y un espeto de Conil. Angulas, aceite, ajo, qué más te voy a decir. Guiño de Santa Teresa a un San Juan de la Cruz que entiende que aquestas letras llevan impresas la luz. Un retruécano de Góngora, las rimas que desgranó el soneto Quevedo, la madre que lo parió. Que sin respeto a la muerte en sus reyertas de cantina, ni siquiera te imaginas cómo ha tentado a la suerte. El caradura de Lope, el que a todas conquistó, de su arte vivió un sueño que en boca de Calderón, el mayor bien es pequeño y los sueños, sueños son. Aleixandre, Cela, Reverte, Cervantes que los guio. Los bellos versos de Lorca, Unamuno no se rindió. Las de Avignon de Picasso, y Dalí que lo enmarcó. Gasol e Iniesta se empeñan en traerse aquí el mundial, o la mortífera diestra de la zurda de Nadal.

Di qué estrella

te guiará en tu viaje por el ancho mar

que habita la verdad…

Bajado hasta las penumbras, los que encendieron la luz. La inmortalidad de aquél que con todo se atrevió. Que a todos siempre ganó hasta que al final perdió. Por episodios lograda la libertad arrebatada, largamente tan llorada y de nuevo vuelta a ganar. Un pasado a escondidas de historias nunca narradas. De Historia muy mal contada por todos desconocida. De locos que se pusieron todo el mundo por montera, que con telas, tres maderas y un pan duro en el bolsillo tan rápido eliminaron subterfugios y fronteras, forjaron mil alianzas y sin ayuda expandieran el idioma más enorme que poetas conocieran. De súbditos ejemplares, dirigentes desiguales. Algunos bravos y justos, otros sobre lo mediocre. Desertores de grandeza, cobardes, breves y ocres. Gentes que pueden con todo, que caen y que se levantan con una fe irrenunciable que a la adversidad espanta. “No me hables del pasado, no quiero crédito histórico”, dice la monja en África que sin dudarlo se inhibe de nuestro cliché folclórico. Países Bálticos, Somalia, Mali, Irak y Senegal. En Turquía y en el Líbano, Colombia o Afganistán, nuestro ejército entregado a la busca de la paz y el apoyo indispensable de la ONG más audaz.

Tierra bella

se eleva por encima de la oscuridad

la noche pasará…

Sostenella siempre. Enmendalla, jamás. El tercio que no se rinde, español que perecerá. Las amenazas a uno que había nacido en Pasajes, tullido de vida inquiera, de segundo, Olavarrieta y de primero de Lezo, cuatro estampidos bien puestos y ahí que les queda eso. Los músculos que no aguantan, el hambre que dá cornás, el bicho frente a nosotros, no hay miedo, el miedo es ná. Vengan aquí las sañas, las injusticias y aprietos, que nuestras anchas espaldas mostrarán qué es el respeto. Venga a nosotros el caos, aceptamos siempre el reto, no nos podrán doblegar, no nos quitarán el cetro. No me otorgues la razón, ni tampoco me la quites. Discútemelo, cabrón, hasta que te desgañites. Y luego dame un abrazo, saca el vino, alza la copa, que termine la contienda. Brinda conmigo mi hermano, que no tenemos enmienda.

Los indomables

que brindan al sol

atrévete a soñar

con un lugar mejor…

Saetas de Andalucía, sainetes los de Castilla. Sardanas en Cataluña y un Aurresku en tu honor. Ore bien el orador en Levante, en Galicia, en León o en Aragón. Desde la cumbre bravía hasta el mar que nos abraza, no hay tierra como la mía. No hay tierra como la mía. Ni hay casa como esta casa.

Aires de costa

montañas en flor

la tierra de la paz

la luz y del amor

NOTA:

Digo yo que, si hemos que poner letra al himno de España, al menos conviene de motivarla un poco…