SÁNCHEZ Y BIDEN

Seguramente muchos habrán visto el video en el que Sánchez y Biden caminan juntos en dirección a la sala de conferencias donde la plana mayor de la OTAN se iba a reunir. Es notorio que dos países aliados se encuentren tan alejados, hasta el punto de que el americano no emita palabra alguna al español. Uno no sabe qué hay detrás de todo esto, y seguramente nunca lo sabremos. Los diarios digitales alegan varios motivos. Que España siempre está con elecciones (catalanas, madrileñas recientemente) y que el presidente americano no suele llamar a países metidos en procesos electorales para que no se les acuse de apoyar a unos o a otros; que el gobierno ataca a la prensa discrepante, mencionándose en concreto al propio Sánchez, a Iglesias o a Echenique; que Sánchez no llamó en noviembre a Biden para felicitarlo, como hicieron Macron, Merkel o Jonhson; y así…

Tal vez sean esas las razones, tal vez no. Lo cierto es que Biden sí ha hablado con otros países hispanoamericanos, como Costa Rica, Chile o Argentina, cuyos presidentes casualmente sí llamaron a Biden para felicitarlo, y no enviaron un twitter como Sánchez. Claro, las circunstancias particulares de un gobierno con un socio poco partidario de los americanos, como es Podemos, supongo que habrán enrarecido las costumbres hasta el punto de que ahora a Sánchez no lo quieren ni en foto.

Literal.

No deja de ser curioso. Tienen aquí dos bases militares y no nos hablan. Los caminos de la diplomacia a veces son inescrutables, porque para más detalles, el apoyo a Marruecos ha sido explícito por Trump (Sáhara marroquí) y no desmentido por Biden hasta la fecha.

España está en otra cosa. Está en que gane el candidato de Sánchez las primarias de Andalucía para apartar a la molesta Susana Díaz, está en los indultos a personas que lo volverán a hacer, está en machacar a Ayuso, que por cierto ayer metió la pata hasta el corvejón en Plaza de Colón (qué obsesión con llamar la atención), está en llegar a las próximas elecciones con la oposición dividida y ganarlas de nuevo… Esas cosas.

Mientras tanto, en Estados Unidos hay 9,5 millones de puestos de trabajo que no encuentran ocupante y aquí no bajamos del 16% de paro, con la Seguridad Social echando humo por el capó y pendientes del dinero que nos enviará Bruselas.

De crear riqueza, de crear fraternidad, de desarrollar un plan propio de crecimiento, de tener una voz propia, de enervar asuntos de interés general y esas cosas, nada.

Mientras, la oposición se da tiros en el pie como el de ayer en Colón, en el que Ayuso le puso deberes al Rey y Casado no supo cómo salir de aquello muy bien, Arrimadas fue dura con Sánchez ahora que no es nadie y los de VOX con su fiesta particular de los mundos de Yupi.

A ver si al menos la selección gana la Eurocopa y nos juntamos todos a tomar cerveza de nuevo.