SPEECHMAKERS, Ltd.

(Tipo I: apto para cualquier discurso perpetrado entre el centro derecha y el centroizquierda)

–¿Lo qué?

–Que nos han pedido redactar un discurso épico.

–¿Y eso quéhloqueáh?

–Pues eso. Un discurso grandioso, heroico. Algo fuera de lo común…

–Fale.

–Pues venga…

Tras unos segundos de meditación, esenciales en todo proceso creativo, el fabricante de discursos pone a funcionar su prodigiosa mente.

–Ya –dijo este al fin.

–A ver…

–Nuestra gran nación se encuentra…

–No.

–¿Cómo que no?

–Es que no somos una nación. Bueno, sí que somos, pero para algunos no somos. Para algunos solo somos un estado, nada más. Una nación de naciones, creo. Es un tanto complicado de explicar.

–Nación de naciones, Estado, Patria, País…

–País. País está bien.

–Vale. Pues nuestro gran país se encuentra con un reto ante el que todos debemos…

–No.

–¿Cómo que no?

–Todos y todas.

–Vale. Pues nuestro gran país se encuentra con un reto ante el que todos y todas debemos dar al máximo para lograr conquistar…

–No.

–¿Cómo que no?

–Conquistar… viene de conquista. No sé, suena a intervención, a militarismo.

–Bueno, puede tratarse de conquistar un derecho también.

–Sí, pero aquí no se utiliza como la conquista de un derecho, que está bien, sino como la conquista frente a un reto, y eso lo encuentro un tanto intervencionista. Busca otra cosa.

–Mmmhhh, vale. A ver esto. Pues nuestro gran país se encuentra con un reto ante el que todos y todas debemos dar al máximo para lograr superar una situación que ha generado una crisis mundial, a la que nos unimos de forma coordinada con los ciudadanos y ciudadanas de todo el mundo en la consecución de un fin común que por fin establezca las bases de una comunicación fluida y multidisciplinar entre las diversas naciones… Uups.

–¿Qué pasa?

–Que he dicho naciones. Mesascapao…

–Sí, pero no importa. Si se refiere a otros no importa. Sigue, que se me estaba poniendo dura…

(Tipo II, apto para la derecha derecha)

–Nuestra gran nación española es, además de una gran nación, española, y como tal luchará contra el mal que se cierne sobre nosotros, como luchamos en los Tercios de Flandes, en las batallas en el mar, en la conquista de los nuevos territorios que…

–Oye tío…

–… qué.

–Que se trata de un virus, macho.

–¿Y…?

–Que los virus no hablan, ni escuchan…

–Pues que vaya aprendiendo…

–Ufff…

–…territorios que se rindieron ante el incontenible ímpetu del acero español que…

(Tipo III, apto para izquierda izquierda)

(Nota: solo los argumentos. El discurso está en el horno…)

–Es un virus que, al fin y al cabo, es un organismo vivo. Necesita su espacio también, y nosotros y nosotras no somos nadie para quitárselo.

–Además, se puede convivir tranquilamente con él. Todo es cuestión de dejarle claro que no vamos a conculcar sus derechos. Han de contagiar a personas, y ellos y ellas lo entenderán. Siempre ha sido así.

–Exacto. Además, no podemos limitar los derechos ciudadanos por un organismo vivo que únicamente necesita desarrollarse sin sentirse atacado.

–Claro. Si se siente atacado será peor.

–Claroclaro. De esto salimos todos juntos. ¿Otra caña?

–Otra.

–¿Vas mañana a la manifa?

–Vaya preguntas tienes…

–También digo yo…

–Anda, dale con el discurso, y ante todo respeto.

–Vale… virus es de género masculino, ¿no? ¿Habrá virus femeninos? Es que virus es masculino, pero corona es femenino. Se ve que “la corona” es algo femenino, pero cuando se mezcla con el virus… No sé.

–Otia. Ahí me has pillao…

–…

(Otro día pongo el de los nacionalistas, que hoy me da pereza…)

No Comments

Post a Comment