VOILÁ

… o de cómo mantener entretenido a todo un país:

 

Deuda externa España septiembre 2022: 1,5 billones euros (en 2015 era de 1,1)

Presupuesto ingresos año 2023: 390.000 millones

Presupuesto gastos año 2023: 584.000 millones

Déficit de salida del presupuesto, por tanto: 194.000 millones.

Incremento estimado de la deuda: 194.000 millones, claro (los bancos españoles, entre todos, ganan unos 20.000 millones/año, por poner una referencia comparativa)

Nueva deuda año 2023: 1,7 billones

Estimación de PIB 2023: 1,28 billones

Deuda/PIB a finales de 2023: 141% del PIB

 

O sea, que si todo se cumple como estimado, a finales del año 2023 la deuda española será del 141% del PIB.

Seremos unos de los países con mayor deuda pública del mundo. Una deuda que pagarán los jóvenes que hoy trabajan, mediante subidas de impuestos, lentas pero continuadas que, además de esta deuda, deberán pagar las pensiones de la mayor generación española, la que se conoce como el baby boom.

A muchos esto les parecerá un asunto menor.

Tal vez lo sea, pero en mi opinión, deber tanto dinero se convertirá en el futuro en menor capacidad de decisión propia, en mayor dependencia de lo que opinen en Bruselas, o vaya usted a saber dónde.

En ser menos libres, en definitiva.

Por no hablar de que los impuestos subirán. No sólo a los bancos, no, que ganan 20.000 millones al año entre todos. A la clase trabajadora, que somos más de 20 millones de personas.

Mientras tanto, los noticieros abren hoy con la noticia de las modificaciones de calado que se quieren practicar en el Código Penal por los delitos de sedición y malversación. Tal vez alguien tenga el poder de echar dichas modificaciones para atrás, tal vez alguien se de cuenta de lo que todos nos hemos dado cuenta, y se pueda evitar lo que hoy parece inevitable.

Pero para entonces, todo estará resuelto. Y si no, piensen en lo siguiente:

–Los presupuestos ya están aprobados para seguir adelante con el último año de la legislatura.

–El gobierno puede alegar que ellos han logrado que se aprueben todos los presupuestos de la legislatura con solvencia.

–Si al final algún tribunal echa abajo el objeto de la negociación con algún partido (sedición, malversación, etc.), no será culpa del gobierno, que lo ha intentado. Queda bien.

–Quedaría mal el Estado español, que se habrá mostrado insensible con las aspiraciones de los periféricos.

Por tanto, objetivo cumplido, legislatura franca de obstáculos hasta el final con sus presupuestos, los anteriormente mostrados, dejando:

–Una deuda insoportable (a ver si suben los intereses qué pasa),

–Un malestar notable en los periféricos,…

–…o bien una modificación del Código Penal delirante, que dejará a los periféricos conformes.

–De camino, el patio revuelto con todo el mundo discutiendo…

…y listos.

Hay quien a esto lo denomina progreso.

O solidaridad.

O sensibilidad social.

O lo que sea.

Usted… en fin, póngale el nombre que considere.

No Comments

Post a Comment